La productividad en Suiza es extraordinariamente elevada: el PIB suizo es uno de los más altos del mundo. Pese al modesto crecimiento del PIB per cápita en las últimas décadas, el habitante medio en Suiza se puede permitir mucho más que un ciudadano de la zona euro o un estadounidense.

En 2022, el producto interior bruto (PIB) de Suiza se elevó a un total de aproximadamente 781 mil millones de francos, el equivalente de 88.700 francos por habitante. La nación alpina tiene, por tanto, uno de los mayores PIB del mundo.

Si bien es verdad que el PIB per cápita solo ha crecido ligeramente en las últimas décadas, el habitante medio en Suiza puede permitirse mucho más que un ciudadano medio en la zona euro, en Estados Unidos o Reino Unido. El PIB per cápita suizo supera el promedio de la Unión Europea (UE) por la mitad en términos de estándar de poder adquisitivo.

Entre 2010 y 2022, el PIB suizo creció un 0,9 % en el promedio anual, mientras que el incremento fue del 1,2 % en los países de la UE (UE-27). La productividad macroeconómica del trabajo en Suiza creció en torno al 1 % en el promedio anual entre 2000 y 2022. En el sector primario y secundario, sin embargo, este porcentaje se sitúa claramente por encima del 1 por ciento. En la UE y en los países de la OCDE, la productividad laboral experimentó, en el mismo período, un crecimiento similar del 1,1 %.

Cuando en el año 1980 la diferencia entre el PIB per cápita de Suiza y de la media de los países de la OCDE se situaba todavía en torno al 43 %, esta brecha se disparó a cerca del 62 % en 2022. En comparación con la UE, la diferencia se elevaba en el mismo año al 58 %.

Las razones para el bajo crecimiento de la productividad en la última década son el envejecimiento de la población suiza y la situación económica general. Por este motivo, el Consejo Federal aprueba, periódicamente, medidas para fortalecer el emplazamiento económico suizo.