"Con más de mil millones de turistas internacionales viajando por el mundo cada año, el turismo se ha convertido en una poderosa fuerza transformadora que incide de modo decisivo en la vida de millones de personas", declaraba el Secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, con ocasión del Día Mundial del Turismo 2015, celebrado como cada año el 27 de septiembre.
La Asamblea General de las Naciones Unidas tomó nota de ello y proclamó el 2017 «Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo». Al hacerlo, los dirigentes mundiales reconocen que un turismo bien concebido y bien gestionado puede contribuir al desarrollo sostenible tanto a nivel económico y social como medioambiental. En el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la ONU quiere impulsar un cambio en las políticas, las prácticas empresariales y el comportamiento del consumidor en aras de un turismo más sostenible para el desarrollo.
Este Año Internacional constituye una oportunidad única para llamar la atención sobre un sector cuyo impacto y potencial en materia de desarrollo sostenible son enormes. El turismo es uno de los sectores más dinámicos en el mundo en términos de creación de empleo. Este sector proporciona importantes medios de subsistencia a las comunidades locales, contribuyendo así a luchar contra la pobreza y a impulsar la integración de los más desfavorecidos. Al sensibilizar y movilizar a la comunidad turística, se puede contribuir considerablemente a la protección de la biodiversidad preconizando un uso racional de los recursos naturales. El turismo también puede contribuir al fortalecimiento de la paz en el mundo promoviendo la comprensión entre los pueblos, haciendo que se tome mayor conciencia de la riqueza del patrimonio de las diversas civilizaciones e invitando a cada uno a apreciar los valores inherentes a las diferentes culturas.
La COSUDE se compromete con el turismo sostenible en una perspectiva de desarrollo. Apoya, p. ej., al «Grupo de trabajo Turismo y Desarrollo», un centro de investigación suizo que aboga por el derecho de las comunidades anfitrionas a participar en el desarrollo del turismo protegiendo al mismo tiempo su patrimonio cultural y natural. Asimismo, informa a los viajeros y a los responsables de la política y del sector turístico sobre las repercusiones del turismo y promueve un turismo inteligente, respetuoso con el medio ambiente y equitativo para los anfitriones. Además, la COSUDE se compromete con el turismo sostenible sobre todo en el marco de su trabajo de cooperación con Europa del Este.