En India, los edificios absorben más de 33% del consumo de electricidad del país. El sector de la construcción indio experimenta un auge excepcional: de aquí a 2030, deberían ser construidos más de 23 millardos de metros cuadrados. Ello equivale al parque de edificios de toda Europa. Este auge va acompañado de un aumento inigualado de la demanda de electricidad.
Una colaboración indio-suiza
Ante este reto, los gobiernos suizo e indio han puesto en marcha un proyecto de cooperación en el ámbito de la eficiencia energética de los edificios. Financiado por la COSUDE e implementado en colaboración con el Ministerio de Energía y la Oficina de Eficiencia Energética indios, este proyecto se extiende a lo largo de cinco años. Su principal objetivo es reducir el consumo de energía en los edificios nuevos.
Resultados esperados
El proyecto pretende:
Mejorar el rendimiento energético de los grandes edificios administrativos y comerciales permitiendo a los especialistas indios beneficiarse del conocimiento suizo. Los intercambios tienen lugar en forma de talleres.
Reforzar la eficiencia energética de los edificios residenciales mediante la publicación de una guía técnica para el diseño de inmuebles ahorradores de energía.
Reforzar la eficiencia energética en los edificios públicos mediante la formación y el apoyo técnico a Estados (Karnataka, Rajasthan).
Reforzar la calidad y la transparencia de los procedimientos de prueba para los materiales de aislamiento, así como la formación de los profesionales del ramo.
Formar a profesionales y a decisores del sector de la construcción y de la energía y divulgar las buenas prácticas.
De la implementación de este proyecto se encargan expertos suizos e indios en colaboración con contrapartes del sector público y privado.
Primeras líneas directrices
A principios de septiembre de 2014, el gobierno indio lanzó las primeras líneas directrices sobre el diseño de edificios residenciales. Estas medidas conciernen sobre todo a los inmuebles de varios pisos. El documento da indicaciones sobre la orientación de los edificios con el fin de limitar el calor relacionado con la radiación solar, así como sobre el diseño de las ventanas, el aislamiento o incluso la ventilación natural. Asimismo, contiene métodos para reducir el consumo de energía de los aparatos para refrescar los locales, de la iluminación, de los ascensores o de las bombas de agua. El recurso a energías renovables (calentamiento de agua con energía solar, paneles fotovoltaicos) también forma parte de las recomendaciones.